De nuevo en el valle de Oldpar
El sol quema, calienta fuertemente y la temperatura es increíblemente elevada, siento sofoco, ahogo, desespero, pareciera que llevara siglos viviendo en una nevera y apenas lograra salir, y llegara directamente al infierno. Ahora son las 2:28 minutos de la tarde, voy en un taxi, en la ruidosa radio que llevan prendida, termina un Vallenato que nunca recuerdo haber escuchado, el señor conductor le sube el volumen, justo cuando se esta acabando y justo sube el volumen para el empezar a hablar, y dice gritando:
- Epa,
ese es mucho tema, no como esa porquería que se oye hoy día. La radio
que va sonando es del am, de ahí el ruido en el dial, cosa que
hace mucho tiempo no escuchara.
Estoy en Valledupar, capital mundial del vallenato, el calor me tiene fregao, como si nunca hubiese venido aquí; Al escuchar y mirar todo el ambiente, me digo a mi mismo; - Mi mismo, -Mira a tu alrededor, en donde estas cálmate y disfrútalo....
Estoy en Valledupar, capital mundial del vallenato, el calor me tiene fregao, como si nunca hubiese venido aquí; Al escuchar y mirar todo el ambiente, me digo a mi mismo; - Mi mismo, -Mira a tu alrededor, en donde estas cálmate y disfrútalo....
Pero, que
hijueputa calor siento de todos modos, a pesar de que ya le empiezo
a encontrar el lado amable a este momento, ya los olores, ya el aire caliente, ya no sudo mucho.
-Amigo pa
que parte del centro me dijo que vamos..? Me dice, el señor
taxista, a lo que le digo...
- La
verdad, quería ir primero a la casa indígena, para averiguar un par
de cosas pero, ya vamos a llegar al centro, así que déjeme ahí
cerca del CAI de la policía, por ahí es que uno coge carro pa
Atanquez? … Cierto?
-Si
perfecto, mi amigo de una vez arrimo donde mi tio, es que, esta mañana traje a una pareja a hospedarse allí, y dejaron un bolsas, ahí vea... Señala ,
atrás y arriba de mi cabeza.
Apenas hablo de pareja a hospedarse, volteo a mirar a mi derecha, observo un letrero que dice, “hospedaje mi Tio”, y me doy cuenta que no es a casa de un tío de el que va, si no que, al parecer es muy honrado y va a devolver, paquetes olvidados en su lugar de trabajo, el taxi.
Ahora sigue mejorando el ambiente y ya se torna familiar todo lo que se ve en el ruidoso centro de esta ciudad. Llego al lugar indicado, apenas bajo del taxi, se escucha otro ambiente; los vendedores,el aire fresco pasa por entre las ramas de los arboles, los carros y motos que además de su motor, se escucha que pitan insistentemente, como si los problemas de calor y afán se solucionaran al hacer sonar las bocinas.
Casi una ciudad normal, en una carrera loca, en la búsqueda de la felicidad y de adaptarse al modernismo consumidor. De inmediato escucho dos voces casi en coro que dicen;
Apenas hablo de pareja a hospedarse, volteo a mirar a mi derecha, observo un letrero que dice, “hospedaje mi Tio”, y me doy cuenta que no es a casa de un tío de el que va, si no que, al parecer es muy honrado y va a devolver, paquetes olvidados en su lugar de trabajo, el taxi.
Ahora sigue mejorando el ambiente y ya se torna familiar todo lo que se ve en el ruidoso centro de esta ciudad. Llego al lugar indicado, apenas bajo del taxi, se escucha otro ambiente; los vendedores,el aire fresco pasa por entre las ramas de los arboles, los carros y motos que además de su motor, se escucha que pitan insistentemente, como si los problemas de calor y afán se solucionaran al hacer sonar las bocinas.
Casi una ciudad normal, en una carrera loca, en la búsqueda de la felicidad y de adaptarse al modernismo consumidor. De inmediato escucho dos voces casi en coro que dicen;
- Aja!, si va
de viaje, manito ahí esta el carro listo para salir. Pareciera que
me conocieran o que, por llegar en taxi, con cara de cansao
y de hambre, adivinaron para donde viajo.
- Voy
para Atánquez, digo yo, -Pero, necesito comer algo antes, por que tengo
hambre, mucha hambre- Mientras
uno de los señores, toma mi maleta y camina un poco expresa
-Aja, claro, dejamos la maleta en el carro y allí hay frutas y mas que
comer, vamos compadre.
Unos
minutos después, encerrados en en un horno andante, vamos cuatro
personas en silencio, mientras que el señor del carro que nos
lleva, busca debajo de su asiento algo que no encuentra y dice como
un susurro así mismo.
- Creo
que también me lo robaron... ahhh... Continuamos, ahora
vamos todos en silencio, hasta que suena un celular, como por debajo del
asiento y de inmediato escuchamos al conductor decir;
- Claro,
y metí ese celular y el radio debajo del asiento para evitar que me
robaran otra vez... jajaja..
Seguimos
el camino y pasando el puente de río seco, en una casa a borde de
camino, se detiene y grita.
- Ve,
pelao, tráeme una sprite, esa de bote pequeño, bien fría.
Apaga el
motor de vehículo y se baja, corre el asiento un poco hacia
adelante, y metiendo la mano abajo dice; - Aja, aquí estas...ahora
si, vamos a ver.
Al
momento mientas el se sube de nuevo al carro, llega el joven de la
tienda y dice- Aja, primo que te doy.
- Tráeme
una gasiosa de esas pequeñas bien frías. Con la
“gasiosa” en mano, y con una sonrisa de satisfacción en la
cara, continua la marcha el conductor, quien se toma rápidamente la bebida
, tirando la lata vacía en mitad de la caliente pavimentada, y a la
vez, trata de sintonizar una emisora en el dial. Para mi sorpresa de
nuevo busca en la banda AM, que es bastante ruidosa. Suena radio
Guatapuri, hablan de vallenato y suena la música, ya no se oye nada
mas que ruido, decide pasarse a FM y suena una emisora que tiene ene
este instante un enlace con Bogotá, hablando de posibilidades electorales para el mais (MOVIMIENTO ALTERNATIVO INDÍGENA Y SOCIAL) y los partidos alternativos en una ciudad, como valledupar que es un poco de derecha.
El
recorrido de Valledupar hasta Atánquez, nos toco pasar por Río Seco,
Patiyal, la mina y Pontón, finalmente la capital Kankuama nos
recibió con sus calles empinadas, los lugares invadidos por la
guerra, que son espacios usados por el ejercito y la policía
nacional, para resguardar al pueblo, según dicen ellos. En la vía
el conductor saludo a la comadre... y subió al pequeño vehículo a
una pareja que no tenia como llegar desde la Mina. Toda la tarde la
pase saludando a viejos amigos en la emisora y en la biblioteca;
Justo, Nixon, Souldes, Yenifer, además de pasar saludando a la mama
de Daniel y más de su familia.
Estoy a
punto de meterme bajo el toldillo, para descansar un poco y recuperar
energías para el día de mañana, son las 9:07 de la noche, aun
siento calor y ya mate un zancudo canson que pasaba zumbando por mis
oídos, A lo lejos escucho un burro y mas cosas pasan pero, ya es
hora de ir a dormir, el cansancio a causa del clima, el viaje y la
caminada ya me venció.
Atánquez
febrero 17 de 2014.